sábado, julio 12, 2008

Intensivo

Hace casi un mes que no escribía nada, ya que no tengo mucho que contar.

Como el 15 comienza mi viaje y necesitaba dinero (bastante) me he dedicado a trabajar todos los días, ya que contra más días trabaje más dinero entra en la cuenta.
El trabajo tranquilo, lo de siempre, te encuentras de todo, gente simpática, gente tonta, si no hay mucho trabajo te pasas la tarde bromeando con los compañeros para hacer más ameno la espera.
Quizás algo destacable ha sido que me cargué un plato de ¡¡70 euros!! y pienso yo... para que compran platos tan caros si es un restaurante de un museo??!! Vale que esos platos se usan para los jefes, no me parece lógico.
Hay una chica de 17 años que es una cría, en el sentido que tiene que madurar por todos los lados, pero es muy buena chica y muy alegre y realmente nos hace pasar buenos momentos. El problema es cuando le dices que no lo esta haciendo bien o que haga algo o que no se quede hablando o mirando el techo...
Como todos sabréis o casi todos, soy muy despistada, así que necesito mi tiempo para pillar las cosas o hacerlas bien, y no me importa que me corrijan. Pero esta chica se pone de los nervios, o se ofende.